Si lo que siento ahora no lo digo
jamás te lo diré
quedará muerta una palabra
que asomó a la puerta
y no encontró en la voz
final abrigo.
Y lo que he de decirte es como trigo
para nacer sobre tu tierra abierta,
es solamente una semilla cierta
para que siempre quede ya contigo.
Mañana no estaré,
me habre marchado
y solo llevaré como equipaje
el recuerdo de aquello
que te he dado.
Déjame que te diga lo que traje
y guárdalo después,
porque callado
yo guardo tu memoria para el viaje.
Luis Horacio Duran
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